Entre las instituciones Trenca y Fundación Barcelona Zoo existe un marco conceptual de colaboración, es decir, sus intereses comunes son la recuperación y la conservación de la biodiversidad y de la fauna salvaje en las comarcas de poniente, su ámbito de actuación territorial preferente. En este marco de la biodiversidad, se destaca el interés prioritario en especies emblemáticas y bioindicadoras, como el alcaudón chico (Lanius minor) o el buitre negro (Aegypius monachus).

El Proyecto de conservación del alcaudón chico (Lanius minor) en Cataluña está promovido por el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya y ejecutado por Trenca, con el apoyo de entidades públicas y privadas como la Fundación Biodiversidad, el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, WWF España y el propio Zoo de Barcelona. Este año se cumplen diez años de las primeras liberaciones y se ha conseguido de momento evitar la extinción de la especie en nuestro territorio. Los trabajos que realiza Trenca se centran en la gestión del hábitat de las últimas zonas de cría en Lérida, la liberación y seguimiento de polluelos mediante hacking, la alimentación suplementaria y el estudio de la migración, entre otros.

Por otra parte, la Fundación Barcelona Zoo también participa en el Proyecto de puesta en valor de los valores ecosistémicos de las aves carroñeras pirenaicas a través de la red de puntos de alimentación específicos (PAE), a partir del cual, desde hace ocho años, la asociación Trenca gestiona tres de estos puntos en el Pirineo y Prepirineo de Lérida, enmarcados en el Proyecto de reintroducción del buitre negro (Aegypius monachus) en Cataluña. El objetivo de nuestra colaboración es abrir un nuevo PAE, además de para esta especie, para el quebrantahuesos (Gypaetus barbatus), el alimoche (Neophron percnopterus), el milano real (Milvus milvus) y el milano negro (M. migrans), a medio camino entre la actual y única colonia de buitre negro, en Boumort, y Aragón. Además, se instalarán hides para realizar tareas de educación y sensibilización ambientales, así como promover el turismo de naturaleza y, por lo tanto, contribuir al desarrollo rural sostenible. Este nuevo PAE tiene como principal finalidad consolidar las poblaciones de buitre negro y permitir su expansión a nuevos territorios con hábitats idóneos para la especie.