Escultura dedicada a la heroína de una leyenda medieval. Dice la historia que Genoveva de Barbante, esposa de Siegfried de Tréveris, fue acusada falsamente de adulterio por su mayordomo y condenada a muerte. Perdonada por su verdugo, pero, huyó y se escondió durante años con su hijo en una cueva. Allí fue alimentada por una hembra de corzo y pudo sobrevivir. Un día Siegfried, que ya había descubierto la traición del mayordomo y hacía su esposa muerta, estaba de caza persiguiendo unos corzos por el bosque cuando descubrió el escondite de su esposa y pudo restituirle su dignidad. La escultura del Zoo representa Genoveva de Brabante con su hijo en brazos junto a un corzo.
Image
Autor
Montserrat Junoy
Any
1952