La nutria en nuestra casa

La nutria en nuestra casa

 

La nutria común (Lutra lutra) se encuentra en una situación preocupante en buena parte de su antigua área de distribución en Europa, Asia y el norte de África, donde las poblaciones están descendiendo a causa de la contaminación, la sobreexplotación del agua, la destrucción de los bosques de ribera y la caza directa.

 

Por suerte, en Cataluña se ha recuperado notablemente en los últimos años gracias a la mejora de la calidad del agua de nuestros ríos y también al éxito obtenido en el proyecto de reintroducción de la especie que se inició en las cuencas de la Muga y el Fluvià y en las marismas del Empordà a finales del siglo pasado. El Zoo participó en él activamente, y también participa en el programa de los zoos europeos EEP (Programa europeo de especies en peligro) dedicado a su conservación. Recientemente, una hembra de nutria, Talida, ha llegado a Barcelona desde el Zoo de Zúrich y muy pronto el coordinador de este programa le encontrará un compañero para contribuir al mantenimiento de una población estable de la especie en reserva.

Lludriga Zoo BarcelonaPero el Zoo ha seguido colaborando en la preservación de este pequeño mamífero autóctono también en su hábitat natural. Actualmente, a través de la Fundación Barcelona Zoo, colaboramos en el estudio de la nutria en las cuencas del Besòs y el Tordera que lleva a cabo el biogeógrafo Arnau Tolrà con el Consorcio Besòs Tordera y el Observatorio Rivus, que tiene como principal objetivo establecer medidas de conservación que permitan la protección de la especie y de toda su comunidad ecológica. Para ello, se lleva a cabo un seguimiento exhaustivo de los grupos familiares y se evalúa qué factores condicionan en mayor grado su probabilidad de reproducción. Los resultados permitirán integrar nuevos criterios ecológicos en la gestión del medio fluvial.

 

Para satisfacción de todos, la nutria ha vuelto a reproducirse por segundo año consecutivo en el Tordera, después de su extinción local a finales del siglo pasado, y también el año pasado por primera vez en la cuenca del Besòs. Su reproducción es uno de los mejores indicadores del buen estado de los sistemas fluviales y de su correcto funcionamiento ecológico. La progresiva recuperación de la nutria en estas cuencas no significa solo un gran éxito para una especie bandera y carismática, sino también el de toda una comunidad ecológica que se desarrolla bajo su paraguas. Su estudio permitirá definir las acciones de mejora que harán posible avanzar en el largo camino hacia la recuperación del ecosistema fluvial. 

 

Lludriga Zoo Barcelona

 

Un episodio triste de una historia feliz

 

Las zonas de reproducción de la nutria coinciden con los sectores de río con una dinámica fluvial más próxima a la natural, disponibilidad de refugios en las orillas y heterogeneidad de ambientes, con presencia de elementos como madera muerta dentro del cauce, aspectos todos ligados a una mayor abundancia y accesibilidad al alimento, y a una mayor tranquilidad. Por eso, cuando el mes pasado se detectó la presencia continua de un ejemplar en el tramo bajo del Besòs, en pleno parque fluvial de Santa Coloma de Gramenet, la sorpresa fue grande y generó mucha expectación. La nutria huye de la presión humana y su presencia tan cerca de la ciudad sorprendió mucho a los investigadores, que sospecharon que algo no iba bien. Finalmente, hace una semana, la nutria apareció muerta, y los resultados provisionales de la necropsia indican que sufría una grave enfermedad crónica de tipo natural.

Ha sido una visita inesperada con un final triste que, sin embargo, ha permitido a muchos habitantes de la zona ver a una de las nutrias de la población que habita nuevamente el río más arriba. ¡Sin duda un motivo de alegría y esperanza!